Kenia – El país se enfrenta a una alarmante escalada de ciberataques, con un registro de 4.600 millones de incidentes de amenazas cibernéticas en tres meses. Esta cifra más que duplicó la del mismo período del año anterior, lo que subraya la creciente vulnerabilidad de la nación en medio de una rápida transformación digital.
El aumento de las amenazas cibernéticas ha afectado de manera significativa a sectores críticos, incluidos la banca, las telecomunicaciones y los servicios gubernamentales. La Autoridad de Comunicaciones de Kenia (CA) atribuye el repunte a factores como la falta de actualización de sistemas, la limitada concienciación de los usuarios y la proliferación de dispositivos del Internet de las Cosas (IoT) con protocolos de seguridad débiles.
Los expertos advierten que estas amenazas cibernéticas representan no solo un riesgo para la seguridad nacional, sino también una preocupación regional. Los países vecinos de África Oriental, que a menudo dependen de la infraestructura digital de Kenia para transacciones y servicios transfronterizos, son cada vez más vulnerables a los efectos colaterales de estos ataques. En respuesta al panorama de amenazas en aumento, el gobierno keniano está intensificando los esfuerzos para reforzar las medidas de ciberseguridad. Las iniciativas incluyen el fortalecimiento de marcos legales, la mejora de los mecanismos de respuesta a incidentes y la promoción de colaboraciones internacionales para combatir eficazmente la ciberdelincuencia.
Sin embargo, persisten los desafíos. El país enfrenta una importante brecha de talento en ciberseguridad, ya que las universidades producen un promedio de solo 1.500 graduados en esta área al año, muy por debajo de los aproximadamente 45.000 puestos disponibles en el sector. Esta escasez dificulta los esfuerzos para construir una defensa sólida contra el creciente oleaje de amenazas cibernéticas.
A medida que Kenia continúa desarrollando su economía digital, los expertos enfatizan la urgencia de implementar estrategias integrales de ciberseguridad. Fortalecer las defensas, promover la alfabetización digital e invertir en capital humano son pasos cruciales para mitigar los riesgos que plantea la evolución del panorama de amenazas cibernéticas.